Total, que ayer estaba él con un dálmata macho muy bonito que no se separaba de su lado. Le pregunté que si era suyo y me dijo que se lo había encontrado en otra parte de la ciudad dos horas antes y lo había acariciado y desde entonces el perro no se separaba de él. Me dio muchísima lástima porque era un perro muy bueno y noble y el pobre estaba delgadísimo, casi desnutrido.
Me subí a casa y empecé a llamar a las protectoras de animales de mi zona para ver si se lo podían llevar, pero no me cogían el teléfono. Y entonces lo escuché llorar desde mi casa. Me asomé a la ventana y lo vi atadao a una vaya: el barrendero se había ido a desayunar, y para que el perro no lo siguiese al bar, lo había atado y el pobre lloraba un montón. Así que bajé y le llevé comida, agua y un collar de mis perros para que no se hiciese daño. Y llegó el barrendero. Me dijo que a las 14 h se iba a su casa y que él no podía hacerse cargo del perro porque tenía más perros y seguro que lo lastimaban o lo mataban que me lo llevase yo, pero yo no podía llevarmelo porque tengo ya dos y vivo con mis padres, si viviese sola seguro que me lo habría llevado. Total, que me fui con toda la pena a mi casa, pensando todo el tiempo en el perro y me puse a llamar otra vez a las protectoras, pero nada.
Entonces fue cuando se me ocurrió llamar a una amiga mia que tiene dos perros y dos gatos recogidos de la calle y es auxiliar de veterinaria, a ver si a ella se le ocurría qué hacer con el pobre dálmata. Y ¡¡milagro!! me dijo que su prima quería un dálmata!!!!! así que había un poco de esperanza... Así que se vino conmigo y buscamos al barrendero y al perro hasta que los encontramos. Le dijimos que quizás le habíamos encontrado una familia y que lo ibamos a llevar al veterinario y el barrendero se despidió de él. Pero el dalmata no quería separarse!!!! costó muchísimo llevarselo y el pobre lloraba un montón....
Una vez en el veterinario, no le encontró chip. Dijo que llevaba meses en la calle porque estaba desnutrido y que quizás tuviese Leishmania pero que hay un tratamiento nuevo muy bueno para eso. Además le curó una gran herida que tenía en la cabeza y le volvió a dar de comer. El pobre temblaba muchísimo allí con tantas cosas como le hacían!! Dijo que el perro tenía entre 1 año y 4, pero, viendole los dientes, los tiene igual que Manchita y Manchita tiene entre 1 y dos años, así que es jovencito, más a su favor. Total, que dejamos al perro allí en el veterinario hasta que la prima de mi amiga pudiese recogerlo y yo me despedí de él y me fui a la facultad (que llevaba ya dos horas de retraso...). Después me enteré que la prima SI SE LLEVÓ AL PERRO A SU CASA EN CÁDIZ. y que ya está desparasitado y todo. Que se lo quede o no, depende de como se porte el animal, pero es muy muy bueno y seguro que se porta bien. ¡¡Que satisfacción el pensar que quizás le hayamos salvado la vida!!
