
Ha quedado chorreando del rocío que había en la hierba y en las hojas (eran las 8 de la mañana) pero solo por verla como disfrutaba ha valido la pena.
Entre las carreras que se ha pegado y la hora y pico que nos hemos tirado andando, la pobre ha llegado a casa cansadita

A partir de ahora ya se donde pasaremos nuestros ratos libres

Os pongo unas fotos que he encontrado por internet (a ver si un dia me llevo la cámara y le hago a la peque una sesión allí.




