Belinda también tuvo vendada una pata por culpa de una puerta que se la pilló, pero en tres semanas como nueva y aprendió a córrer a tres patas. Eso sí después le costó apoyar la pata, no sé si por costumbre o por miedo pero con los juegos se le olvidó rápido.
Dale un lametón de parte de Belinda y un achuchón de la mía.

