El jueves estábamos colocando la compra en la cocina, estaban todos en la cocina con nosotros menos Naia que estaba por el jardín. Eso que entra y no fijamos y llevaba una de las patas de atrás chorreando sangre.
Primero pensemos que es que se habría clavado algo en una almohadilla, pero la miremos y tenía un corte en uno de los dedos, el corte le ocupaba casi todo el dedo de largo.
La pobrecita sangraba igual que un cochino, intentemos limpiarle un poco la herida para ver mejor el corte pero no hubo manera.
Dejó el suelo llenito de sangre, cada vez que daba un paso el corte se habría y sangraba más, así que la cojimos y la llevemos de urgencias al hospital veterinario.
La veterinaria dijo que era un corte muy profundo, así que se la quedó una hora y media, la tuvo que sedar y la cosió.
Tres puntos internos y uno por fuera le puso la veterinaria. A parte 10 días de antibiótico y antiinflamatorio. Y visita el jueves que viene para ver como tiene la herida.
Jose que estaba trabajando y no sabía nada cuando llego a casa y vio todo el suelo y la escalera llena de sangre me llamó asustado para ver que había pasado, parecía una matanza de la de sangre que había por todas partes, pero es que al salir corriendo para el veterinario ni pensé en limpiar la sangre.
Con esta enana no ganamos para sustos.
En sus nueve meses y medio de vida la han abandonado en un container de basura, la ha atacado una perra, casi se muere cuando la esterilizaron el mes pasado y ahora se hace la pedazo herida.
Si es que le pasa de todo a la pobre.
Así lo tiene hoy, cuatro días después. No tengo fotos del día que se lo hizo porque con los nervios no estaba yo para pensar en hacerle fotos.

