Eras una bolita color canela, que casi no podía andar. Desde pequeño se veía tu nobleza y tu valentía.
Fuiste creciendo y te hiciste un perro grande, musculoso, obediente, cariñoso, que le gustaba mucho comer, las pelotas y jugar con niños... y siempre defendiéndonos, siempre con un buen gesto, siempre ahí para animarnos cuando nos veías tristes.
Siempre has sido muy tranquilo, pero ahora de mayor te gustaba tumbarte en tu sillón, al fresquito, o cerca de la chimenea en invierno, y que nadie te molestase.
Sé que has sido un perro feliz, y que serás feliz allá donde estés, y que seguirás cuidándonos, porque nunca te olvidaremos.
Hace un ratito que te apagaste, tu corazón era tan grande que no ha resistido el edema pulmonar que tenías...
Aún no me hago a la idea que no podré acariciarte más...
Gracias por haber estado en nuestra familia y por hacernos a todos mejores personas...
Tus "hermanos" Dina y Curro ya te echan de menos.
Descansa en paz Nerón. 1-12-1997/ 5-8-2009.
Espérame en el cielo, sé que estarás ahí esperándonos...
