Bueno, pues esta tarde hemos llamado a la vete suya y tenía la clínica cerrada así que al final, me he acercado al veterinario que tengo cerca. Le ha tomado la temperatura y estaba bien, opina que es por el cambio de pienso que le ha revuelto la tripita y que probablemente no le siente bien.
Me ha dicho que le ponga dieta blanda (arroz cocido, pescado cocido... etc) y que en unos días vaya introduciendo poco a poco el pienso antiguo, osea, luposan.
Le he pedido luposan a una chica que es distribuidora por aquí y que lo hace al peso, me parece que compraré un cubo como de basura de esos grandes, con tapa para ver si se conserva mejor (porque esa era la razón por la que quería cambiar el pienso, mayormente, por al conservación inadecuada de luposan aquí en mi casa).
Pues nada, ahora le he puesto arroz cocido, ha comido un poquito y otra vez para atrás, le he echado un poquito de aceite y ya ha comido un poquito más, pero aún así se ha dejado poco menos de la mitad. Veremos si mañana va comiendo más y cuando la vaya viendo comer un poquito más, pues iré introduciendo luposan de nuevo.
Joe, ésto me pilla fatal, el sábado nos vamos de crucero y viene una amiga a casa a quedarse con ellos (todo el día y la noche, vamos, que le presto mi casa para que viva en ella unos días junto a mis perros, le quería pagar, pero me dice que no quiere que le pague, habrá que hacerlo de estrangis). A ver si para el sábado ya come normal y me voy con una preocupación menos.
Ay, lo que nos hacen sufrir. A veces mola que no hablen, pero hay otras veces que dan ganas de que hablen y te digan: es que no me gusta ese pienso, es que no me sienta bien, es que soy una caprichosa y quiero subsistir a base de chuches...
