Lucía va a cumplir 6 añitos ya, y desde pequeña, como era mala comilona él le daba de comer las bolitas una a una. Y sigue a día de hoy.

Además lo hace en plan juego: tira la bolita al suelo y le dice "ay, que te la quito, me la como yo" y entonces ella corre y se la come. Asi dos veces al día.
Se lo he explicado por activa y por pasiva, pero aparte de que es cabezón, terco como una mula, con 74 años... Con lo "coñón" que es jajajaa, no va a dejar que su Lucía esté sin comer ni medio día. Se muere él de pena.

No se da cuenta que le ha hecho más mal que bien, aunque cuando lo hablamos, él lo reconoce pero no lo puede evitar.