¡Hola!
Vereis, tengo un pequeño asunto que resolver con Eliot, estoy haciendo lo que buenamente puedo, pero os pido consejo para que me digais si lo hago bien o si debo tomar otro tipo de forma de tratar este asunto, que afortunadamente, tampoco considero que sea grave.
Como ya habré comentado alguna vez, Eliot ladra muchas veces a perros macho, he venido observándolo y me parece (aunque quiero observarlo más) ladrar a los machos que son muy dominante. Tampoco considero que él sea dominante, porque en su actitud, él se deja hacer, no se muestra agresivo y no monta, pero creo que los dominantes o agresivos no le gustan, parece que a los miedosos tampoco le hacen mucha gracia. A veces ladra a los perros cuando están lejanos, y cuando se acerca se pone en disposición de jugar (así qeu también me parece que les ladra porque quiere acercarse a jugar y conocer al otro perro), el problema es que muchos de esos dueños no quieren que sus perros se relacionen con otros perros, entonces él sigue ladrando.
Bueno, el caso es que todas las tardes me voy a un parque algo alejado de casa y para llegar paso por una casa en la que hay un perro. La primera vez que pasamos, el perro de la casa aquella se puso a ladrar y golpear la puerta (parecía que de manera violenta), a lo que Eliot respondió ladrando e intentando acercarse a la puerta. Bueno, pues ahora, cada vez que pasamos por delante de esa puerta, se pone a ladrar (si el otro perro está en la casa contesta, y si no está, lógicamente no lo hace), pero él sigue.
Estoy haciendo lo siguiente, estoy pasando por la acera contraria a la casa, cuando empieza a hacer señales de ladrar, le llamo la atención con un ¡EH! (él funciona más con el eh que con el no) y si deja de ladrar le felicito y le digo lo buen chico que es, si vuelve a hacer mención de ladrar, vuelvo a hacer lo mismo.
El caso es que conforme pasan los días, cuando le felicito por callarse, a los segundos vuelve a fijarse en la puerta y a hacer mención de ladrar.
Suelo hacer eso, le felicito si no le presta atención a la puerta, y si está atento a ella, le llamo la atención. Si funcionaba, le iba a hacer aproximaciones sucesivas a la puerta en cuestión, ir acercándolo. Mi objetivo: que pase del perro, y aunque ladre, no le conteste ni le preste atención. Igual así se le va quitando la manía de ladrar a los perros.
¿Lo estoy haciendo bien?
También he pensado que podría llevar alguna cosa para distraerle, una golosina, un juguete o algo, y si deja de prestarle atención a la puerta, felicitarle.
Espero que me podais ayudar.
Un saludo.
