A mi casa una vez llaman. Lo cojo:
-Diga?
-Hola hija mia, soy tu tia, que tal estais?
-Pues bien, tia bien, como siempre.
(ahi ya empiezo a notar la voz rara, pero digo, será el teléfono, o tendrá catarro) Total que la mujer sigue hablando.
-Y tu madre que hace, tal cual.
-Pues por aqui anda, haciendo cosas, te la paso?
-A pues dile que voy a ir esta tarde con tu prima a tomar cafe.
Ahi ya saltaron mis alarmas, porque si, tengo prima, pero más bien desapegada, y mas por esas fechas, y dije: esta no es mi tia. Mi prima venir a casa? Ni de cola!
-oiga señora usted no es Yolanda, verdad? Es que creo que se ha equivocado de sobrina.
Cuando le conte a mi madre que la conversacion que estaba llevando era con una desconocida, le cabian los puños en la boca. Porque aun estuvimos un ratico hablando.
