

Si algo hemos aprendido, es que con la leishmania se puede vivir si se detecta pronto, y que los análisis periódicos son la clave.
Los que habéis pasado pr la sospecha, los que convivís con la enfermedad y los que estamos SIEMPRE en riesgo por la zona en la que vivimos debemos luchar cada día contra esta enfermedad. ¿Cómo? con controles cada seis meses, con paciencia y con obstinación.
Ánimo, que esta enfermedad hoy en día ya no puede con ninguno de nuestros perris SI LA DETECTAMOS A TIEMPO.