El pasado día 24 de octubre Luna cumplió un añito y ese día no le dimos pienso para comer sino un variado: filetito de pollo, hamburguesita, yogur y pan bimbo (sí, tenéis razón, lo mismo nos pasamos).


El caso es que desde el día siguiente y de forma más o menos gradual ha ido comiendo cada vez menos de su ración, llegándosela a dejar enterita desde hace un par de días.
Es que se lo ponemos en el comedero y lo rechaza por completo. No funciona ni dándoselo nosotros de nuestra mano. La perra está muerta de hambre, porque la comida "humana" sí la quiere como una loca (tonta no es).
Su pienso es el Royal Canin Labrador Retriever Junior (el adulto es para mayores de 15 meses) y ella tiene 12 meses y poco.
Está clarísimo, desde que probó el néctar y la ambrosía no quiere otra cosa.
Seguramente metimos la pata

Como hace ya dos o tres días que no come nada hemos comprado el adulto de la misma marca (croqueta mucho más grande, que incluso le cuesta masticar) pero ni con esas. Se lo mezclamos con el junior pero come un par de bolas del nuevo y ya, vamos, que se lo deja todo.
Nos tiene preocupados la pequeñaja con eso de no comer. Además está más maligna que antes (ladra más, hace menos caso), será por el hambre que está pasando.
Le seguimos insistiendo aunque no coma???
Cambiamos de marca???
Qué opináis???