Sheylor escribió:Gracias, pero de momento hoy no se ha vuelto a rascar así que la observaremos y si lo vuelve a hacer la llevaremos al veterinario a que nos enseñe.
Bueno, yo al hacer una consulta en el foro me han sugerido q podía ser un problema de glándulas y aquí estoy inmersa en este nuevo mundo q desonocía por completo.
Una cosa: ¿tan complicado es q es preciso q nos enseñe el vete? Creo q alguien por ahí ha dicho q la peluquera se lo hace. A ver si encontramos un vídeo o instrucciones claras y me lanzo a hacérselo en casa. ¿Estas glándulas están internas o externas? ¿Con un simple presión en la zona perianal cogiéndole todo el ano sirve? Voy lanzadaaaaa
Hay un vídeo en youtube... pero no me acuerdo de cómo se llama.
Es recomendable saber hacerlo, pero una vez adquirida la teoría es relativamente sencillo. Eso si con guantes y con ropa que no te "importe" que se ensucie por si las moscas...
No me llameis perro...no merezco tan alto calificativo...no soy tan fiel, no soy tan leal, solo soy un ser humano.
Los miro a los ojos, y sé que nunca estaré sola si ellos caminan a mi lado
los míos es q se las limpian ellos solitos, menuda suerte tengo
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).
los míos es q se las limpian ellos solitos, menuda suerte tengo
Muy útiles los vídeos. Creo q son más q explícitos. Con tal explicación creo q se puede realizar sin necesidad d ir al vete, a no ser q prefiramos q lo hagan ellos, claro.
yo es q no sé si sería capaz, de todos modos por suerte siempre sueltan la baba solitos, es un día de recoger una caca asquerosa pero no me ha tocado nunca apretarles ahí.
A mí me lo explicó una amiga, casi me da algo de pensar q lo iba a tener q hacer hasta q Bogart soltó la primera babilla
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).
nuriaBogartDana escribió:yo es q no sé si sería capaz, de todos modos por suerte siempre sueltan la baba solitos, es un día de recoger una caca asquerosa pero no me ha tocado nunca apretarles ahí.
A mí me lo explicó una amiga, casi me da algo de pensar q lo iba a tener q hacer hasta q Bogart soltó la primera babilla
¿Y dónde notas esa babilla, en la misma caca?
Yo sólo la he visto físicamente el día de la manta, otras veces sólo noto el intenso olor férrico pero supongo q al lamérselo no lo derrama. En este caso, ¿se supone q lo expulsa, no? Y así no sería necesario vaciárselo yo, ¿no? Ya me estoy rajando...
pues la caca está rodeada ese día de una baba densa q hace q la caca parezca un pelín más clara, y además pa cogerla está blandito por la baba. Yo les tengo recortado el pelo de esa zona para q sea más fácil q mantengan limpias las glándulas anales.
Ese día si lo cagan solitos te digo q es una caca un pelín asquerosa, vamos q de primeras puedes pensar q están descompuestos
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).
Pues finalmente lo hice. Sólo le salió tema de un lado. Creo recordar q son 2 sacos, ¿me equivoco? Entonces sólo he notado uno hinchadito y se lo he vaciado. Lo q pasa es q no he notado el olor tan desagradable q me llevó a descubrir esto de los sacos anales. De hecho, ahora, tras horas de realizárselo, le noto aún olor. Me resulta contradictorio. ¿Puedo subsanar esto del olor de alguna manera? Pq ya he vaciado el tema, no sé q más debo hacer...
ni idea, es q no he pasado por eso nunca y creo q con lo asqueroso q me parece los llevaría al vete
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).
por lo q dice en internet es normal q huela incluso echándolo de forma normal, así q controlalo y si ves q huele ma´s de la cuenta aunque se lo has vaciado lo llevas al vete por si tiene infección.
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).