Bueno contaros que vamos adelantando.
Muy despacio, porque tampoco puedo estar dando el coñazo al mundo para que vengan a mi casa, pero más vale despacio que nada.
Eso sí, en lo que hemos solventado a pasos agigantados es que no tiene territorialidad ninguna, Natalia ya vino dos veces a casa con sus 3 perros, y la segunda vez, no veas como les busca para jugar.
Pensé que sería proque Natalia es así y desprende ese encanto (ironía) que la tiene acojonaita cuando la ve, porque sabe que a esa no vale morderla porque encima, la pincha más, así que busqué el efecto contrario, a Rosina que es superdulce y Sawyer, el cachorro compartido con Alba y conmigo.
Pues igual, en casa vino Sawyer y después de intentar decirle "tio deja mi erizo rosa jolines, pero suelta el naranja también, dame ese hueso que es mio, jolines vete ya que me revuelves mis cosas..." y ver que no había manera, se relajó, le cedió sus juguetes, sus huesos (que se zampó en 30 min) y ella se tumbó a dormir, mientras Sawyer se lo pasaba pipa!
Así que puedo decir, que mi perra deja venir a sus amiguitos a casa, y yo también claro está
Tú tienes familia, pareja, amigos, compañeros... tu perro sólo te tiene a ti.
