Seth escribió:A mi me pasaba lo mismo con mi "Tiza" una mestiza de galgo con podenco, en la calle no nos hacia nada de caso, hemos llegado a tardar 4 horas en recuperarla, encima vivimos en una zona con mucho campo y conejos y nos era imposible hacernos con ella, la llevamos a clase de obediencia, agility, educadores caninos, cuerdas largas, premios..... asi durante 3 años, hasta que por desesperacion y por no querer tirar la toalla de que ella pudiera disfrutar de correr libremente por el campo me decidi a comprar un collar de impulsos. Ahora la perra es otra salimos a pasear y con dos llamadas como mucho viene a mi llamada.
El invento funciono desde el primer dia, solo me hizo falta 3 impulsos electricos a muy baja intensidad (probados por mi antes). Ahora mi perra juega con otros perros, corre libremente, incluso la dejo ir detras de algun conejo (lo lleva en la sangre) que se que si la llamo acude a la llamada y de paso se lleva un premio.
Si lo hubiera probado antes no habria tirado tanto dinero.
Todo el mundo está en contra de este método, me dicen que clases de obediencia y clases de obediencia, pero yo creo que mi perro necesita el collar como el comer, y el collar no es nada doloroso, duelen más los azotes que le doy cuando se porta mal (casi siempre).