SOS...TENEMOS MUY POCO TIEMPO PARA BUSCARLES UN HOGAR... AYU
Cada vez que veo éstas fotos me emociono, las ví por primera hará dentro de poco cinco meses. Hacía poco que habíamos perdido a nuestro caniche tras una penosa enfermedad y de vez en cuando visitaba las webs y foros de las protectoras. En realidad me quedé enganchada ante tanta historia de abandono, mirando fotos de animales de mirada triste e incierto futuro.
Un día, en una de esas webs los vi, vi a este grupito de perros que buscaban urgentemente familias que los adoptaran y sin pensarlo contacté con la dirección de correo que daban. Tras esa dirección me encontré a una persona fantástica, Jéssica, voluntaria del Refugio Escuela de Sevilla. Ella me mandó las fotos que vemos en este mensaje y un par de videos de la primera visita a la casa de los voluntarios del refugio. Gracias a ella, a su entusiasmo y a las facilidades que nos dio en todo momento, poco después, en noviembre, llegaban a nuestra casa Uma y Rona, dos de las pequeñas que podéis ver en esas fotos.
Nosotros adoptamos a Rona y Uma fue adoptada por el novio de mi hija. Poco después, los padres de él adoptaron a Pelusa y su hermana adoptó a Comino, un pequeñín que estaba en la protectora, con lo cual han sido cuatro los que han venido a vivir a Madrid.
Adoptar a Rona ha sido la mejor decisión que podíamos haber tomado, estamos felices con ella, es cariñosa, tranquila, educada, un amor de perrita.
Hoy es ya muy tarde pero mañana prometo poneros unas fotos recientes para que veáis cómo se encuentra ahora nuestra pequeña.
Gracias por difundir la historia de estos chiquitines, ojalá todos encuentren un hogar, se lo merecen.
Buenas noches
Un día, en una de esas webs los vi, vi a este grupito de perros que buscaban urgentemente familias que los adoptaran y sin pensarlo contacté con la dirección de correo que daban. Tras esa dirección me encontré a una persona fantástica, Jéssica, voluntaria del Refugio Escuela de Sevilla. Ella me mandó las fotos que vemos en este mensaje y un par de videos de la primera visita a la casa de los voluntarios del refugio. Gracias a ella, a su entusiasmo y a las facilidades que nos dio en todo momento, poco después, en noviembre, llegaban a nuestra casa Uma y Rona, dos de las pequeñas que podéis ver en esas fotos.
Nosotros adoptamos a Rona y Uma fue adoptada por el novio de mi hija. Poco después, los padres de él adoptaron a Pelusa y su hermana adoptó a Comino, un pequeñín que estaba en la protectora, con lo cual han sido cuatro los que han venido a vivir a Madrid.
Adoptar a Rona ha sido la mejor decisión que podíamos haber tomado, estamos felices con ella, es cariñosa, tranquila, educada, un amor de perrita.
Hoy es ya muy tarde pero mañana prometo poneros unas fotos recientes para que veáis cómo se encuentra ahora nuestra pequeña.
Gracias por difundir la historia de estos chiquitines, ojalá todos encuentren un hogar, se lo merecen.
Buenas noches