Te echo muchísimo de menos. Fuiste el mejor regalo que me pudieron hacer para mi cumpleaños...Nunca te olvidaré. Desde que no estás aquí, mi vida es diferente. Me despierto sintiéndote abrir la puerta de mi dormitorio y viniendo a ver si estoy ya despierta para darte una caricia, o marchándote las veces que me hacía la dormida. Cuando me levantaba, estabas deseando que desayunase aver si te caía algún cereal con fibra de esos que te gustaban tanto (siempre te lo tiraba a cosa hecha para que desayunaras conmigo). O cuando desayunaba tostadas con jamón, que te plantabas a la vera mía mirando para el suelo aver si se caía algo mientras lo cortaba... Después del apetitoso desayuno te venías a mi lado haciéndome la pelota para echarte más y cuando me veías levantarme, rápidamente te ibas para la puerta para que te sacara porque querías hacer tus cositas... Al volver a casa bebías tu agüita y mirabas si te había caído algo de comida pero que va, muchas veces no tenías esa suerte, y te echabas a dormir, aunque primero te dabas tu vuelta por la casa haber si había llegado "el papa" o "la mama" mientras tú estabas fuera... Cuando llegaba "el papa" o "la mama", le dabas su buen recibimiento, y siempre le echabas una mano cocinando, ¡mirándoles!, yo creo que te aprendiste todas las recetas porque seguías paso a paso sus movimientos y, como ponías la cara de no haber comido nunca, siempre te caía algo que pudieras comer... Cuando veías que no te caía nada, venías a mi cuarto haber que estaba haciendo, siempre estaba estudiando Manchita, y no podía darte los paseos que me hubiera gustado darte ni subirte encima mía porque no podía escribir en el ordenador!! Pero si que muchas veces te salías con la tuya y te subía y guardaba unos minutos para ti para acurrucarte y darte mi calor. A la hora de comer, eras la que más vueltas dabas siguiendo los platos y mirando tu comedero, ¡que ya podías haber aprendido a recoger la mesa!, como siempre te decía... Hasta que no se recogía la mesa estabas al loro haber si tenías suerte ese día y podías disfrutar de comida casera, esos platos preferidos de mi gordi que eran....¡todos! porque no eras delicada, pero los que le hacías más fiestas era al pollo asado, al cocido, la sopita, y la pasta. La siesta te gustaba echártela conmigo en el salón, bien en los pies al lado de la estufa, bien en el sofá cuando sabías que no estaba "la mama". Por la tarde, siempre me gustaba sacarte a la cepanza o incluso llevarte conmigo a andar por el vial. Cuando nos quedábamos en la cepanza siempre esperabas al Gitano y demás amigos, aunque más a sus dueños que eran los que te acariciaban... Mirabas también a los demás perros que te daban miedo. Ese miedo creo que te lo transmití yo, pues de siempre me han dado miedo los perros peligrosos y yo esperaba que tú te enfrentases a esos perros feos y peligrosos, pero no, nos quedábamos las dos en el banco quietas esperando a que sus dueños vinieran a por ellos y si estabas jugando a revolcarte en el césped te venías corriendo para mí para que te cuidara...¿recuerdas? Si nos íbamos al vial, tenías que andar más y, aunque al principio no querías ir, luego no te quejabas porque sabías que teníamos que hacer ambas deporte....Te echo tanto de menos Manchita.... Al llegar a casa, llegabas reventada y no había Manchita hasta el día siguiente, las pocas fuerzas que te quedaban las reservabas para las 9 y 30, la hora de la cena, la hora en la que mirabas a "la mama" para sé que levantara a cocinar que ya tenías hambre. A la hora de dormir, de nuevo te ponías en mis pies al ladito de la estufa calentita y buscabas mi mano para acariciarte...ahora soy yo la que te busca debajo de la mesa pero no estás...aunque si te siento... Por la noche cuando me desvelo, aún siento tus ronquidos...Siempre me han relajado y ahora parece que los escucho porque te siento conmigo... Aunque ya no estás aquí, te siento a mi lado. No podías hablar, pero si escuchar y siempre has estado ahí cuando necesitaba un abrazado o un besito. Cuando me oías llorar eras la primerita en venir y poner tus patitas en la camita moviendo el rabito para animarme. Para mucha gente, eras un chucho pero para tu familia, eras la alegría de casa (aunque no supieras comportarte en el coche de la tata, del tate, del papa o de Luis y pisaras en el suelo mojado) y para tus amigos una cocker spaniel muy buena y muy cariñosa que siempre buscaba una caricia. Te Quiero Manchita. Espérame allá donde estés y recibeme como siempre...pues lo más complicado es llegar a casa y ver que no me recibes y no estás...
Mi perrita murió de pronto, de una parada cardíaca...
Un triste adiós para mi cocker Manchita....
Re: Un triste adiós para mi cocker Manchita....
lo lamento tanto un abrazote para esos eternos momentos
Re: Un triste adiós para mi cocker Manchita....
Lo siento mucho.
"¿Qué es lo que desprecias? Por ello serás conocido." - Muad'Dib
Re: Un triste adiós para mi cocker Manchita....
Lo siento muchísimo.
Ánimo!!
Ánimo!!
Aquí reposan los restos de una criatura que fue bella sin vanidad, fuerte sin insolencia, valiente sin ferocidad y tuvo todas las virtudes del hombre y ninguno de sus defectos.
Escrito por Lord Byron en la tumba de su perro.
Escrito por Lord Byron en la tumba de su perro.
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Re: Un triste adiós para mi cocker Manchita....
Lo siento muchisimo.
Animo
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