Hola amigos,
Realmente no sabemos por dónde empezar, lo que os vamos a contar es muy largo, pero creemos que cuantos más detalles mejor para quien nos pueda ayudar:
Tenemos una cachorrita de Labrador Retriever (Arwen) de 5 meses y medio supuestos (más tarde explicaremos el por qué) a la que, salir a la calle a pasear le resulta un verdadero drama y no por el hecho de salir, sino por la gente que se cruza en su camino.
En un principio, cuando salimos todo va más o menos bien, pero cuando comienza a ver gente cambia radicalmente. Con el rabito entre las piernas, tira con fuerza de la correa, se agacha, las orejas hacia atrás y sería capaz de cruzar al otro lado si pudiera con tal de no acercarse a nadie. Si alguien se digna en decirle algo, la cosa ya se pone fea porque ladra efusivamente y hasta llega a hacerse pipí.
Cuando la llevamos a pasear al campo por ejemplo,donde podemos dejarla libre es muy feliz. También hay gente, aunque no mucha pero, eso sí, ella los observa desde la lejanía y si alguien intenta acercarse ladra igual. Hoy por primera vez, observamos que en un campo muy amplio se ha detenido para observar a una Señora y finalmente se ha ido a por ella sólo para ladrar sin acercarse del todo.
Con los demás animales no tiene ningún problema (incluso tenemos dos gatos) y tampoco lo tiene con las personas que desde el día de su llegada vienen a casa.
El caso es que Arwen pues así se llama, viene de un criador. Llegó a casa con 3 meses e inmediatamente la llevamos a nuestro veterinario para que le echara un vistazo y comprobar que todo marchaba correctamente. Resultó que las vacunas que llevaba no le servían para nada, pues la más importante (parvovirosis), no la llevaba y el resto eran pupis que se pusieron un dia antes de entregármela y que según nuestro veterinario eran insuficientes para su edad. Total, a ponerlas todas de nuevo. También resultó que observé que Arwen tenía una marca en una pata donde le faltaba pelito y creí que era de alguna pelea con sus hermanos, pero con el veterinario descubrimos que no era una marca sino dos, una en cada pata a la misma altura. Conclusión, Arwen había sido intubada. Motivo? Seguramente parvovirosis teniendo en cuenta que justamente esa vacuna le faltaba.
Para no retrasar su contacto con el exterior y puesto que hasta que su vacunación no fuera completa me dijeron que no podía pisar el suelo de la calle, opté por llevármela cada día al trabajo en una mochila y de paso, el proceso de adaptación con los gatos se aseguraba más grato. En la oficina tampoco hubo en principio ningún problema con las personas que allí había normalmente. Hasta que un buen día, a mi jefe se le ocurrió la gran idea de darle un susto haciendo ruidos con la boca y corriendo hacia ella (sin comentarios). No me preguntéis que tiene en la cabeza este buen hombre porque ni yo lo se ... El caso es que, ese día Arwen ladró por primera vez. Una semana después, el caso volvió a repetirse con un lampista que vino a casa y esa vez hasta se hizo pipí por primera vez, cosa que ya nos preocupó y sorprendió mucho.
Arwen es un cielo, muy inteligente y cariñosa, aprende muy deprisa, pero este problema nos tiene muy desolados porque no sabemos cuál es su origen. Podría ser por culpa del g... de mi jefe, o quizá porque al haber estado intubada, la separaron muy pequeña de su familia y no ha vivido el proceso de sociabilización, o por demasiado sobeteo de los médicos que la trataron, o por llevarla en brazos hasta que pudo pasear por la calle ... ni idea.
En general como véis, nos han tomado el pelo a base de bien. Que Arwen ha sido tratada de algo aunque no sabemos con certeza de qué, es evidente para nuestro veterinario. Suponemos que por este motivo es más pequeña de lo normal ...
No nos importa este hecho, pues todos los animales de nuestra casa tienen algún problema por el que iban a ser sacrificados y es por eso que están conmigo, lo que sí nos duele es que no se nos informara del problema para saber cómo proceder y lo más grave de todo, es que por casualidades de la vida, cuando llegamos a ese criador, resultó que el dueño fue amigo mío y al que no veía desde hacía muchísimos años (con amigos así, quién desea enemigos...)
En fin, si alguien pudiera ayudarnos lo agradeceríamos mucho sobre todo porque Arwen está sufriendo en una etapa en la que debería ser más feliz que nunca y disfrutar de todo lo que la rodea.
Un abrazo,
Paula, Ivo y Arwen