¿Buscaríais otro dueño..?
¿Buscaríais otro dueño..?
Buenas tardes,
Alguno puede que recuerde mi historia, busqué ayuda porque no podía controlar a mi Beagle. Pues bien, he tratado de hacer todo lo que ha estado en mis manos durante sus dos años y medio de vida. Os aseguro que he hecho todo lo que he podido.
La situación con mi perra se volvió crítica el pasado miércoles por la tarde, cuando tras un dia de universidad y la perra sola en casa, llegué y me encontré con que había abierto todas las puertas de la casa, se había comido mi medicina para la alergia, un bombon de chocolate, papel higiénico, destrozó ropa, se cagó por la casa y encima meó encima de la cama. Os aseguro que no se qué hacer, estoy harto, no puedo más. Los primeros dos años trataba de contener la ira, pero cada vez va a peor, el miércoles fue horroroso, perdí los estribos y me volví loco. Llegué incluso a autolesionarme, y lo que es peor, me da miedo que en un ataque de rabia pueda herir a mi perra de manera grave. Esta situación se ha dado en más de una ocasión.
Sí, lo sé, he fallado como adiestrador de mi perra. Ella es para mi como una parte más de mi cuerpo. Mi familia me dice que no puedo hacer más, que la dé en adopción porque hay gente que sí que podrá criarla mejor. Yo vivo en la ciudad, no tengo tiempo para hacer que se canse ya que soy estudiante, y ni un duro para poder contratar a un adiestrador. Me siento deprimido, sé que la que más está sufriendo es ella y en parte me siento egoísta por no dejar que ella pueda estar con otra persona que la pueda ayudar a ser feliz, o más feliz de lo que es conmigo. Pero por otra parte no sé si podría estar sin ella.
Mi madre, al ver lo que pasó el miercoles decidió, siempre pensando en mi bien, buscar por ella misma un nuevo dueño para mi perra. Lo encontró. Esta mañana se la llevaba. Llevo desde el miércoles por la noche (cuando me enteré de que ya había encontrado otro dueño) llorando sin parar. Tan solo unos ratitos de lucidez, pero luego me da la pena y no puedo contenerme.
Finalmente la perra vuelve esta noche, el supuesto nuevo dueño ha resultado ser algo que no deseabamos, un caradura. Mi madre se ha negado a dejar a la perra allí y ella está de vuelta.
Ahora es cuando ya no sé ni qué hacer. Por una parte me gustaría que llegara y pudiera cogerla y quedarmela para siempre, pero por otra sé que todo volvería a ir mal.
¿Alguna vez habeis tenido la sensación de que es imposible hacer nada más? Os aseguro que es deprimente.
Por ello os pido consejo a vosotros, que sois los que mejor podreis pensar en la perra (ya que teneis experiencia). ¿Buscaríais otro dueño para mi perra?
Por favor, sé que parece que esté intentando quitarme la patata caliente de encima, pero es que no sé que más hacer y la que peor lo está pasando es mi pobre perra.
Un saludo y gracias de antemano.
Alguno puede que recuerde mi historia, busqué ayuda porque no podía controlar a mi Beagle. Pues bien, he tratado de hacer todo lo que ha estado en mis manos durante sus dos años y medio de vida. Os aseguro que he hecho todo lo que he podido.
La situación con mi perra se volvió crítica el pasado miércoles por la tarde, cuando tras un dia de universidad y la perra sola en casa, llegué y me encontré con que había abierto todas las puertas de la casa, se había comido mi medicina para la alergia, un bombon de chocolate, papel higiénico, destrozó ropa, se cagó por la casa y encima meó encima de la cama. Os aseguro que no se qué hacer, estoy harto, no puedo más. Los primeros dos años trataba de contener la ira, pero cada vez va a peor, el miércoles fue horroroso, perdí los estribos y me volví loco. Llegué incluso a autolesionarme, y lo que es peor, me da miedo que en un ataque de rabia pueda herir a mi perra de manera grave. Esta situación se ha dado en más de una ocasión.
Sí, lo sé, he fallado como adiestrador de mi perra. Ella es para mi como una parte más de mi cuerpo. Mi familia me dice que no puedo hacer más, que la dé en adopción porque hay gente que sí que podrá criarla mejor. Yo vivo en la ciudad, no tengo tiempo para hacer que se canse ya que soy estudiante, y ni un duro para poder contratar a un adiestrador. Me siento deprimido, sé que la que más está sufriendo es ella y en parte me siento egoísta por no dejar que ella pueda estar con otra persona que la pueda ayudar a ser feliz, o más feliz de lo que es conmigo. Pero por otra parte no sé si podría estar sin ella.
Mi madre, al ver lo que pasó el miercoles decidió, siempre pensando en mi bien, buscar por ella misma un nuevo dueño para mi perra. Lo encontró. Esta mañana se la llevaba. Llevo desde el miércoles por la noche (cuando me enteré de que ya había encontrado otro dueño) llorando sin parar. Tan solo unos ratitos de lucidez, pero luego me da la pena y no puedo contenerme.
Finalmente la perra vuelve esta noche, el supuesto nuevo dueño ha resultado ser algo que no deseabamos, un caradura. Mi madre se ha negado a dejar a la perra allí y ella está de vuelta.
Ahora es cuando ya no sé ni qué hacer. Por una parte me gustaría que llegara y pudiera cogerla y quedarmela para siempre, pero por otra sé que todo volvería a ir mal.
¿Alguna vez habeis tenido la sensación de que es imposible hacer nada más? Os aseguro que es deprimente.
Por ello os pido consejo a vosotros, que sois los que mejor podreis pensar en la perra (ya que teneis experiencia). ¿Buscaríais otro dueño para mi perra?
Por favor, sé que parece que esté intentando quitarme la patata caliente de encima, pero es que no sé que más hacer y la que peor lo está pasando es mi pobre perra.
Un saludo y gracias de antemano.
- aireesther
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Yo no buscaría otros dueños, incluso tuve una época en la que pensaba cuando llegaba ¿qué me encontraré? pero creo que con paciencia perseverancia y si TODOS los de la casa os unís, podreís con el problema.
Mucha suerte
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No me llameis perro...no merezco tan alto calificativo...no soy tan fiel, no soy tan leal, solo soy un ser humano.
Los miro a los ojos, y sé que nunca estaré sola si ellos caminan a mi lado
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- piriwiki
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Has dicho que eres estudiante, aprovecha eso, coge de la biblioteca libros y empápatelos para que te ayuden a actuar con ella correctamente y demás, no la des, te vas a arrepentir, si la quieres tanto como parece ser, busca otra alternativa, que te ayuden incluso.
Tú tienes familia, pareja, amigos, compañeros... tu perro sólo te tiene a ti.
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Re: ¿Buscaríais otro dueño..?
Jonda escribió:Buenas tardes,
Alguno puede que recuerde mi historia, busqué ayuda porque no podía controlar a mi Beagle. Pues bien, he tratado de hacer todo lo que ha estado en mis manos durante sus dos años y medio de vida. Os aseguro que he hecho todo lo que he podido.
La situación con mi perra se volvió crítica el pasado miércoles por la tarde, cuando tras un dia de universidad y la perra sola en casa, llegué y me encontré con que había abierto todas las puertas de la casa, se había comido mi medicina para la alergia, un bombon de chocolate, papel higiénico, destrozó ropa, se cagó por la casa y encima meó encima de la cama. Os aseguro que no se qué hacer, estoy harto, no puedo más. Los primeros dos años trataba de contener la ira, pero cada vez va a peor, el miércoles fue horroroso, perdí los estribos y me volví loco. Llegué incluso a autolesionarme, y lo que es peor, me da miedo que en un ataque de rabia pueda herir a mi perra de manera grave. Esta situación se ha dado en más de una ocasión.
Sí, lo sé, he fallado como adiestrador de mi perra. Ella es para mi como una parte más de mi cuerpo. Mi familia me dice que no puedo hacer más, que la dé en adopción porque hay gente que sí que podrá criarla mejor. Yo vivo en la ciudad, no tengo tiempo para hacer que se canse ya que soy estudiante, y ni un duro para poder contratar a un adiestrador. Me siento deprimido, sé que la que más está sufriendo es ella y en parte me siento egoísta por no dejar que ella pueda estar con otra persona que la pueda ayudar a ser feliz, o más feliz de lo que es conmigo. Pero por otra parte no sé si podría estar sin ella.
Mi madre, al ver lo que pasó el miercoles decidió, siempre pensando en mi bien, buscar por ella misma un nuevo dueño para mi perra. Lo encontró. Esta mañana se la llevaba. Llevo desde el miércoles por la noche (cuando me enteré de que ya había encontrado otro dueño) llorando sin parar. Tan solo unos ratitos de lucidez, pero luego me da la pena y no puedo contenerme.
Finalmente la perra vuelve esta noche, el supuesto nuevo dueño ha resultado ser algo que no deseabamos, un caradura. Mi madre se ha negado a dejar a la perra allí y ella está de vuelta.
Ahora es cuando ya no sé ni qué hacer. Por una parte me gustaría que llegara y pudiera cogerla y quedarmela para siempre, pero por otra sé que todo volvería a ir mal.
¿Alguna vez habeis tenido la sensación de que es imposible hacer nada más? Os aseguro que es deprimente.
Por ello os pido consejo a vosotros, que sois los que mejor podreis pensar en la perra (ya que teneis experiencia). ¿Buscaríais otro dueño para mi perra?
Por favor, sé que parece que esté intentando quitarme la patata caliente de encima, pero es que no sé que más hacer y la que peor lo está pasando es mi pobre perra.
Un saludo y gracias de antemano.
Hola, soy nueva en el foro, de hecho entré aquí al leer tu mensaje. Trabajo como voluntaria en protes de animales desde hace más de 10 años, y te puedo decir algo, tu perra tiene un problema de simple solución, con unos pasos que debes seguir se solucionará, de hecho si quieres más respaldo a lo que te digo, consulta con tu vete mi teoría para que te la confirme.
Tu perra padece de un trastorno muy habitual llamado "ansiedad por separación", mi perra también lo padeció. Tienes un perro beagle, una de las razas más dóciles existentes hoy en día y por ésta razón si lo haces bien podrás ayudarla. Todo depende de tí.
Lo que no puedes hacer es darla en adopción con éste problema, ni justificar el lesionar a tu perra con que te pones nervioso, dado que ésto es maltrato y sólo acentuará más su problema. Además no tienes derecho a golpearla ni nada, si has sido tú el que no la supo educar, ni se supo informar sobre lo que posiblemente le suceda.
Te dejo los pasos a seguir para solucionarlo, has de tener en cuenta que la solución no es mágica y que tomará un tiempo. Debes ser coherente, y seguir éstos pasos tanto tú como todos los miembros de la familia que vivan en casa, incluso si hay niños. Todo ésto lo debes acompañar de ejercicio DIARIO, de al menos 1 hora repartida en tres veces o dos como mínimo. Si haces todo ésto, y en unos 3 o 4 meses siendo persistente y responsable con lo que has de hacer (que te lo dejo aquí apuntado paso a paso) y aún así la perra no mejoró ni un poco, sólo entonces podrás decir que has hecho lo posible. Por otra parte incluso si la quieres dar, deberías comenzar ésta rutina para ella, que la ayudará a adaptarse a su nuevo hogar en caso de que así lo consigas. Es tu responsabilidad solucionarlo y aquí te dejo las herramientas para hacerlo
QUE ES LA ANSIEDAD POR SEPARACIÓN?
En un porcentaje alto la mayoría de los problemas de comportamiento de los perros aparecen cuando el propietario está ausente. La mayor parte de estos problemas se deben a un problema de existencia de ansiedad o estrés. En el caso de la ansiedad por separación se produce una incapacidad por parte del perro para permanecer separado de sus propietarios, ni siquiera durante espacios cortos de tiempo. Esta incapacidad no tiene porqué ocurrir con la ausencia de todos los propietarios de la casa, puede ocurrir sólo con algún propietario en particular o simplemente con el mero hecho del abandono en sí con independencia de la persona que acompañe al animal aunque no suele ser lo común.
La ansiedad por separación es acompañxxxx todos sus casos por uno o varios de estos hechos, destrozos, ladridos o aullidos y eliminación inapropiada. Estos signos aparecerán única y exclusivamente en ausencia del propietario.
El tratamiento óptimo para la ansiedad por separación consiste en la combinación de un tratamiento farmacológico (clomicalm o anafranil – CLOMIPRAMINA) y una terapia de comportamiento. El objetivo es potenciar en el perro actitudes tranquilas e ignorar aquellas que se consideran ansiosas. Se pretende hacer del perro un animal más independiente del propietario para evitar precisamente esta ansiedad por separación.
El pronóstico de la ansiedad por separación es en general bueno, sobre todo si el problema ha aparecido hace poco tiempo. En este sentido resulta interesante destacar que muchos problemas de ansiedad por separación son diagnosticados en fases muy avanzadas del proceso, algo que compromete la respuesta del tratamiento.
La ansiedad por separación es un problema de comportamiento muy frecuente en el perro, entre un 20% y un 40% de los problemas de conducta que se dan en una consulta de etología. La conducta destructiva y la eliminación inadecuada se encuentran entre los problemas más frecuentes, y aunque estos pueden provenir de numerosas causas en un porcentaje elevado son consecuencia de un problema de ansiedad por separación.
Se puede manifestar en dos situaciones diferentes, bien cuando los propietarios abandonan el domicilio o bien cuando estos están en el mismo pero el perro no tiene acceso a ellos.
Un perro puede responder de 3 maneras diferentes ante este problema. El primer grupo no muestra ningún proceso de estrés, el segundo sufren una disminución de la actividad acompañxxxx de anorexia y probablemente de cambios fisiológicos indicativos de estrés (estos no suelen ser motivo de consulta debido a que su respuesta no resulta molesta aún a pesar de que si existe un problema) y el tercer grupo muestra uno o varios de los siguientes síntomas.
- Aumento de la actividad, especialmente la conducta exploratoria. Generalmente se convierte en una conducta destructiva dirigida a pertenencias del propietario marcadas con el olor de este o hacia puertas, ventanas, paredes, alfombras, etc. El destrozo generalmente es cercano a puertas y ventanas.
Para esto es conveniente el uso de juguetes tipo kong y cambiar a menudo el resto de juguetes y así enriquecer el contexto del perro. Los juguetes pueden ser juguetes para morder, fuertes y divertidos, no juguetes para destrozar (blandos y aburridos). El uso de repelentes como colonia o cítricos en puertas puede evitar temporalmente que estas sean mordidas pero no es una solución. Aconsejo comprar un “dap” que es un dispensador de feromonas que se enchufa a la pared como un ambientador. Puedo proporcionártelo si no lo encuentras, se compra en centro veterinarios.
Aumento de las vocalizaciones (ladridos, gemidos y aullidos). Tanto esta conducta como la anterior se pueden interpretar como intentos del perro por reunirse con su propietario.
Ignora la conducta del perro cuando entres y salgas de la casa para que aprenda a que no por mucho intentar “reunirse contigo” van a conseguirlo. Es fundamental que aprenda que esa actitud no va a ningún sitio y que no van a obtener resultados con ella para que dejen de realizarla.
- Pérdida del control voluntario de la defecación o micción.
Este paso debería de ir disminuyendo según disminuye la ansiedad sin intervenir en el proceso. Es algo involuntario y por lo tanto hemos de ignorarlo y centrarnos en los otros comportamientos hasta ver si al bajar el nivel de estrés este comportamiento empieza a desaparecer solo. Si no ocurriese así entonces nos plantearíamos como actuar en su momento pero ahora mismo mejor ignorar su conducta y premiar mucho cuando lo haga en la calle.
Hay que insistir en que no todos los perros que sufren de ansiedad por separación muestran todos los síntomas que hemos expuesto anteriormente. En menor frecuencia pueden aparecer otros síntomas como vómitos, diarrea y dermatitis acral por lamido.
Curiosamente, algunos animales que muestran ansiedad por separación al quedarse solos en el domicilio no manifiestan ningún problema si se quedan en el automóvil.
Sea como fuere, la respuesta de ansiedad del perro empieza a observarse muchas veces antes de que el propietario abandone el domicilio y más concretamente cuando el animal percibe que la salida del dueño es inminente. Este comportamiento llega a su punto máximo poco tiempo después – entre 30 minutos y una hora – de la salida del dueño. Frecuentemente la respuesta decrece después de esta fase aguda, aunque puede volver a aumentar y disminuir varias veces durante el periodo de ausencia del propietario.
Es importante la grabación en vídeo para poder observar esto
Algunos perros con este problema parecen ser muy dependientes del dueño siguiéndoles a todas partes y reclamando su atención constantemente. Esta conducta se acentúa en la partida del dueño y a su regreso.
Ignorar al perro todo lo posible y enriquecer su entorno con juguetes etc., en la calle el comportamiento no ha de cambiar, solo en casa.
Frecuentemente la ansiedad por separación aparece cuando hay una disminución en la intensidad del contacto entre el perro y sus propietarios. Esto puede ocurrir, por ejemplo, cuando acaba un periodo vacacional.
Algunos perros con APS muestran además problemas de fobias que podrían indicar que la tendencia a mostrar respuestas de miedo exageradas en otros contextos puede contribuir al desarrollo de la ansiedad por separación.
También existen estudios en los que se demuestra que el destete a una edad demasiado temprana aumente el riesgo de que el perro sufra esta ansiedad. Igualmente ocurre con las experiencias traumáticas durante las primeras semanas de vida.
El hiperapego supone según muchos especialistas una de las causas más probables de la ansiedad por separación. Los dueños que refuerzan las demandas de atención del perro hacen que este llegue a sufrir una excesiva dependencia de éste .
La frustración y el aburrimiento también son causantes de APS, un entorno empobrecido y sin un condimento que entretenga al perro da lugar a una ansiedad en mayor o menor grado.
PASOS A SEGUIR:
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es del estado de ánimo del animal, no porque lo veamos tranquilo significa que hemos acabado con el problema puesto que este mismo acontece precisamente cuando los dueños no están en casa, por lo tanto nada tiene porque ver el carácter del perro o que en otras ocasiones el perro esté en total calma y acepte bien los acontecimientos. Por este motivo hemos de provocar este estado de estrés en el perro dentro de unos límites en los que tanto nosotros como él mismo podamos controlar la situación, nunca debemos forzar una situación de estrés pues si se nos va de las manos seguramente echaríamos al traste parte del trabajo realizado anteriormente.
Teniendo en cuenta esto debemos de ser conscientes de la noción del tiempo, es decir, si un perro aguanta 1 minuto antes de tener un episodio de estrés no podemos forzarle a aguantar 2 minutos al segundo día de tratamiento. Es un tiempo corto aparentemente pero en realidad es el DOBLE de tiempo y no debemos dejarnos llevar por una noción de tiempo equivocada.
El trabajo ha de realizarse de forma muy progresiva y si es posible evaluando todos los datos que podamos bien con una grabadora o con una cámara de vídeo.
Trabajos de desapego:
- Debemos de impedir que el perro nos siga por todas las partes de la casa, para este caso lo ideal es enseñar al perro los comandos sentado y quieto y efectuarlos. Cuando el perro haya realizado bien el trabajo lo premiaremos por ello sin sobreexcitarlo, si esto ocurre ignoraremos su conducta. El quieto es una orden que ha de enseñarse progresivamente, no podemos intentar hacer un quieto perdiéndonos de la vista del animal el primer día, esto es casi imposible y el perro nos seguirá en cuanto nos pierda.
- Otra forma de realizar este desapego es poner barreras en la casa en forma de tablas o puertas para bebés, posicionando en un lado de la casa al perro y permaneciendo en el otro lado nosotros en tiempos y momentos distintos, sin forzar los tiempos al principio y siempre sin obligar al perro a meterse en el lado que tiene que estar, debemos “engañarlo” dejándole un kong o algo que les entretenga mientras nosotros nos vamos al otro lado de la casa. Para lograr esto hemos de enriquecer el ambiente del lugar donde se vaya a quedar el perro con juguetes que intercambiaremos a menudo, este así mismo será el lugar donde el perro coma y donde se le den la mayor parte de los premios hasta que asimile este lugar como un sitio donde permanecer de manera agradable y tranquila. Es muy posible que al principio de esta terapia el perro empieza a ladrar o pedir salir, ante esto no debemos hacer caso hasta el momento en el que calle o esté tranquilo durante unos segundos como poco, en ese momento abriremos la puerta o tabla como si pasásemos al otro lado a buscar algo sin dejar que el perro salga y volviendo a cerrar con nosotros dentro, ignorando cualquier comportamiento del perro que indique estrés y sin dar importancia a nuestra acción no tomándolo como una liberación del perro ante nuestra presencia sino como algo “normal” dentro de nuestra conducta de poder circular por la casa sin interferencias del perro. Al salir dejaremos la puerta abierta “por descuido” y el perro tendrá su liberación sin haber mostrado interés alguno por parte del dueño tanto en su estancia en este lugar como en su salida del mismo. Es importante realizar esto en distintas partes de la casa, en distintos momentos y en distintas duraciones de tiempo siempre acordándonos del tiempo que en ese momento soporte el animal y sin forzarlo. Diferenciar el nivel de estrés del perro es difícil para un propietario sin experiencia, por lo tanto se aconseja que hasta que no se logre este punto adecuadamente no se interactúe con el perro, no hacer nada es mejor que hacer algo mal en estas ocasiones.
- De este mismo modo utilizaremos la terapia de la puerta. Esta consiste en ir a la puerta como si fuésemos a irnos y jugar a tocar el pomo, abrir, cerrar, dejar un rato abierta la puerta sin dejar que los perros salgan obstaculizando con nuestro cuerpo o preferentemente usando el comando “quieto”, etc. Esto lo debemos de hacer también en las salidas, esperaremos a que los perros se sienten por si solos para empezar el paseo. Los perros han de acostumbrarse a que todo lo hasta ahora relacionado con la ida del dueño, puerta, sonido de la cerradura, etc., no tiene porqué suceder siempre igual y así aprenderán a que el sonido de la cerradura no tiene porqué suponer la llegada o la salida de nadie al igual que no lo supone el sonido del pomo de la puerta del baño o de cualquier otra habitación de la casa.
- Relacionado con el punto anterior realizaremos todas las pautas que hagamos a la hora de salir, ponernos la ropa, zapatillas, lavarnos, ponerles las correas a los perros, etc., y luego no saldremos a la calle. Esto lo haremos de manera indiscriminada y sin orden alguno para no crear una rutina de pautas que las perras puedan identificar. Si siempre hacemos los mismos movimientos aprenderán a identificar la secuencia de estos. También pasearemos al perro por la casa con la correa y luego se la quitaremos, y se la pondremos sin llegar a salir, podremos salir a la calle con la correa del perro pero sin el perro para que no identifique que coger la correa sea sinónimo de salir a la calle, etc.
- Saldremos al descansillo de la escalera varias veces al día, entornaremos la puerta y permaneceremos allí unos segundos como si viniese alguien, entraremos sin hacer caso y seguiremos con lo que estábamos haciendo. De esta misma manera según el perro vaya evolucionando iremos incrementando el proceso y primero cerraremos la puerta y haremos lo mismo, luego bajaremos al piso de abajo y subiremos, luego al portal, etc. En caso de viviendas unifamiliares haremos el proceso igualmente alejándonos de la casa en vez de bajando pisos. Haremos cada ejercicio varias veces al día un mínimo de 1 semana por ejercicio y no avanzaremos al paso siguiente si no vemos que el perro avance hacia un estado de mayor relajación. Según le vayamos dejando más tiempo solo, le podremos dejar juguetes tipo kong para entretener al perro en lo que bajamos a por el pan o al portal, etc., siempre teniendo en cuenta al principio no superar el tiempo en el que el perro tarda en dejar esta distracción.
- Mantendremos unas normas estrictas en casa en las que la comunicación con el perro ha de ser mínima, solo hemos de premiar cuando esté tranquilo de manera un poco fría, sin excedernos para no excitar al perro, y el resto del tiempo hemos de intentar ignorar al perro. Paliaremos esto con una dinámica de juego en la calle mejor de la actual. Así al perro le enseñaremos a que en casa ha de permanecer tranquilo y el único refuerzo que va a recibir va a ser por estar tranquilo.
- Observaremos cuales son los espacios preferidos por el perro e intentaremos acoplar este espacio para él cuando nosotros no estemos, hay perros que se encuentran más seguros en una parte de la casa que en otra y esto no debemos de impedírselo. Así mismo limitaremos el espacio haciendo un parque para perros problemáticos en el que el perro no tendrá acceso a ninguna cosa que pueda ser susceptible de destrozar o mordisquear para paliar su estrés, enseñaremos a que los juguetes son la mejor forma de paliar su estrés. Buscaremos juguetes interactivos o los improvisaremos.
- Observaremos y grabaremos que factores externos pueden estar afectando a las perras en su comportamiento, ruidos, etc.
- Utilizaremos una grabadora o cámara de vídeo para las salidas breves y contabilizaremos los ladridos cada día y momento de la salida, así como evaluaremos los destrozos que va realizando si van decreciendo o no.
- Llevaremos un cronómetro para contabilizar el tiempo de las salidas.
SALIDAS:
- 1ª y 2ª semana. Comenzaremos a realizar la terapia de la puerta, los ejercicios de quieto y sentado. Los ejercicios de quieto y sentado han de ensayarlos todos aquellos que vivan con el perro de manera progresiva y en los momentos de después de los paseos o cuando el perro esté más tranquilo. Las salidas durante la primera semana se evitarán salvo al rellano de la escalera con la puerta entornada (no olvidaros las llaves dentro) y haremos un mínimo de 5 salidas por la mañana y 5 por la tarde.
- A mitad de semana las salidas pueden irse haciendo ya intentando cerrar la puerta y en el rellano, no más de 15 segundos, hemos de intentar entrar antes de que las perras puedan empezar a ladrar, si han empezado meteremos la llave en la cerradura y esperaremos un momento de silencio para entrar. Es importante entrar sin hacer caso como en todas las demás ocasiones. No premiamos al perro por este comportamiento pues no estamos haciendo una obediencia sino una habituación. 10 salidas al día.
- 3ª y 4ª semana. Saldremos hasta el piso de abajo o incluso el portal. 6 salidas al día. Bajaremos y subiremos sin entretenernos pero sin prisa. Podremos utilizar juguetes tipo kong para estas salidas breves.
- Semanas sucesivas. Iremos aumentando el tiempo de salidas poco a poco.
- NO EFECTUAR ESTOS EJERCICIOS SIN ASESORAMIENTO DE UN PROFESIONAL. ANTE CUALQUIER DUDA O SUCESO QUE NO SE PUEDA CONTROLAR POR PARTE DEL DUEÑO CONSULTAREMOS CON EL PROFESIONAL ADECUADO.
- ES IMPRESCINDIBLE LLEVAR UN SEGUIMIENTO DEL TRATAMIENTO Y SU EVOLUCIÓN. CONTACTA CON TU PROFESIONAL CONTRATADO CADA 10 DÍAS PARA INFORMARLE DE LOS PROGRESOS Y LAS DUDAS QUE SE TENGAN.
- EN CASO DE NO EVOLUCIONAR SATISFACTORIAMENTE ES NECESARIO REALIZAR UNA SEGUNDA EVALUACIÓN PARA PLANTEAR LA POSIBILIDAD DE EL USO DE OTRO TIPO DE TERAPIAS, PAUTAS Y EL USO DE LA FARMACOLOGÍA COMO APOYO.
- LOS TRATAMIENTOS FARMACOLÓGICOS SIEMPRE SERÁN LLEVADOS A CABO POR UN PROFESIONAL VETERINARIO ESPECIALISTA EN COMPORTAMIENTO ANIMAL.
Sobre todo también, cuando vayas a irte realmente ignora a tu perra completamente durante media hora o más antes de prepararte para salir y al regresar a casa COMO SI NO EXISTIESE, ni saludos ni nada hasta que esté completamente relajada (ésto lo notarás si no te sigue por la casa y esté echada por ejemplo). De la misma forma cuando llegues y haya roto algo IGNORARLA TOTALMENTE es lo mejor, porque así no relaciona que si se porta mal tú le prestarás atención (por más que ésta atención sea negativa porque estás enfadado, es atención y es lo que busca con éste comportamiento).
De la misma forma te sugiero que consultes con un etólogo, seguro que tu vete conoce alguno y si no te ayudo a conseguirlo.
te recomiendo que todo lo consultes con un veterinario y no te quedes simplemente con lo que te decimos aquí. Ya nos contarás cómo ha ido.
Suerte!
Llegará el día en que el resto de la creación animal podrá adquirir esos derechos que nunca pudieron ser alejados de ellos más que por la mano de la tiranía. [Jeremy Bentham]
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- Principiante
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- Registrado: Vie Nov 19, 2010 6:44 pm
El tema de destruir cosas, defecar dentro de casa, etc, son síntomas del problema. Además el aburrimiento deriva en ansiedad habitualmente y en comportamientos destructivos. Si te lees los síntomas de ésta enfermedad lo verás. Pero como dije antes, consultar con un vete antes para saber si coincide es lo ideal.MAD23 escribió:Ojo, que no digo que no lo sea, pero de donde sacais que tenga una ansiedad por separacion y no sea simple aburrimiento por ejemplo?
Mi propia perra actuaba así y con éstas pautas dejó de hacerlo.
Saludos!
pd. Meterla en una jaula? es como mínimo peligroso hacer eso con un perro, además es maltratarlo psicológicamente y físicamente.
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- vero_dalpa
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- Registrado: Jue Sep 20, 2007 1:43 am
Cuanto la paseas al día??
Dices que por ser estudiante, no la puedes cansar como sería apropiado,entonces...no la sacas nunca <'?? Porque esto ser´´ia más impostante de lo que tú te cres.
Olle, y no es ninguna tonteria.. Porque no llamas al adiestrador de la tele???
Te entiendo cuando dices que tienes el sentimiento de " no poder hacer nada más por ella"... pero en realidad es mentirse a uno mismo, los perros son retos días tras días y estoy segura de que si sacas paciencia donde no la hay, podrás con ella.
Hay mini cursos gratuitos en muchos pueblos y ciudades donde te enseñan de manera muy basica cositas.
Dices que por ser estudiante, no la puedes cansar como sería apropiado,entonces...no la sacas nunca <'?? Porque esto ser´´ia más impostante de lo que tú te cres.
Olle, y no es ninguna tonteria.. Porque no llamas al adiestrador de la tele???
Te entiendo cuando dices que tienes el sentimiento de " no poder hacer nada más por ella"... pero en realidad es mentirse a uno mismo, los perros son retos días tras días y estoy segura de que si sacas paciencia donde no la hay, podrás con ella.
Hay mini cursos gratuitos en muchos pueblos y ciudades donde te enseñan de manera muy basica cositas.