En el zoosanitario de Málaga, que por mucho que el ayuntamiento lo niegue, es una perrera (y de las infames, diría yo), no cobran nada por dejar un perro.
Y ponen auténticas trabas a la hora de adoptarlo, que si es que el veterinario no está... que si es que aún no está disponible aunque la dueña lo haya entregado y firmado una renuncia... etc.
Todo, menos trabajar, para quitarte la idea de que lo saques de la perrera y adoptes.
¿Por qué?
Porque es mucho más barato y hay que hacer menos trabajo, matando al animal, que dándolo en adopción.